EDITOR VEA Games
DESARROLLADOR My.Games
GÉNERO Aventura
AÑO 2024
VERSIÓN ANALIZADA PS5
PRECIO 29,99€

Un precioso plataformas indie en 2D y 3D

Nikoderiko: The Magical World ha entrado por la puerta grande entre los plataformas del panorama indie, poniéndose incluso a la altura de otros grandes referentes del género. Este título, desarrollado con una clara inspiración en archiconocidas franquicias de videojuegos como Crash Bandicoot o Donkey Kong, logra establecer su propia identidad gracias a una combinación de diseños visuales encantadores, mecánicas bien estructuradas y una propuesta cooperativa que, sin duda, enriquece la experiencia de juego. Además, que esté completamente localizado al español en texto y audio, algo que se ve poco en los juegos indie o AA, hace que el producto sea todavía más redondo, y se muestre mucho más cuidado.

Uno de los aspectos que hace que Nikoderiko: The Magical World brille por sí mismo es su acertada dirección artística. La combinación de gráficos en 2D y 3D permite crear un mundo lleno de vida y color, en el que el jugador se siente inmerso desde el primer momento. Cada nivel está diseñado de forma que tanto los fondos en dos dimensiones como los elementos interactivos en tres dimensiones se complementan, creando una experiencia visual rica y coherente que ayuda a diferenciarlo de otros títulos del género.

La estética visual también es un reflejo de sus influencias; muchos escenarios evocan a la nostalgia de otros juegos, tanto en sus ambientes exóticos como en el enfoque de plataformas por el que se desplaza el personaje. Sin embargo, el juego no se limita a imitar u homenajear dichas licencias, sino que añade su propio estilo a los diseños de personajes y mundos. La dirección artística logra aportar un toque único, con un uso efectivo de colores vibrantes y una gran variedad de niveles que van desde selvas hasta templos antiguos, ofreciendo al jugador una experiencia visual atractiva y variada.

Niveles variados, divertidos y dinámicos…

En cuanto a su gameplay, Nikoderiko: The Magical World se ha esforzado por mantener un equilibrio en sus controles y mecánicas. La jugabilidad es fluida, sencilla y, sobre todo, accesible. A pesar de que es fácil familiarizarse con los controles, el juego logra ofrecer un nivel de dificultad que desafía al jugador en las instancias adecuadas, siendo exigente sin volverse frustrante. Esto es especialmente importante en el género de plataformas, donde el manejo preciso es crucial. La curva de aprendizaje es suave, y el juego se asegura de presentar nuevas mecánicas y obstáculos de forma gradual, permitiendo que el jugador se adapte antes de enfrentarse a desafíos mayores.

Los niveles están diseñados para permitir que los jugadores más experimentados puedan disfrutar de retos adicionales, pero sin ser demasiado tediosos para aquellos que prefieren una experiencia más relajada. Es posible completar el juego al 100% sin que esto se convierta en una tarea monótona o frustrante, algo que a menudo es difícil de lograr en este género. Cada nivel cuenta con pequeños desafíos y coleccionables que invitan a explorar, pero sin forzar al jugador a repetir secciones una y otra vez.

Uno de los grandes aciertos de Nikoderiko: The Magical World es la incorporación de minijuegos y niveles variados que mantienen el interés del jugador a lo largo de toda la partida. Estos elementos brindan dinamismo al juego y evitan que caiga en la repetitividad. Cada nivel ofrece algún tipo de mecánica nueva o desafiante, como secuencias de persecución, rompecabezas sencillos o desafíos de precisión que se integran bien en la narrativa general del juego.

Los minijuegos, que se presentan como desafíos opcionales, están muy bien planteados y añaden un toque de frescura. Algunos de ellos pueden ser pequeños retos de habilidad o puzles que requieren pensar rápido, y completarlos ofrece una sensación de logro sin que se sientan como un obstáculo en el progreso de la historia. Estos detalles, aunque sencillos, elevan la experiencia general, ofreciendo pequeños descansos en la acción principal y brindando al jugador una razón para regresar a cada nivel en busca de secretos.

… para jugar solo o en compañía

Uno de los puntos fuertes que Nikoderiko: The Magical World ofrece es su componente cooperativo local. Este modo permite que dos jugadores compartan la aventura en la misma pantalla, lo cual no solo añade una capa adicional de diversión, sino que hace que el juego sea mucho más atractivo para aquellos que disfrutan de experiencias compartidas en el mismo espacio. La posibilidad de jugar en modo cooperativo enriquece el diseño de niveles, y muchos de los desafíos están diseñados para que ambos jugadores puedan colaborar, ya sea para resolver un rompecabezas o para enfrentarse a enemigos juntos.

La implementación de este modo cooperativo ha sido un acierto total, ya que permite que la experiencia de juego sea aún más disfrutable y memorable. Completar los niveles en compañía añade un valor de rejugabilidad que invita a explorar y descubrir juntos cada rincón del mundo de Nikoderiko. Este enfoque hace que el título destaque entre otros juegos indie, convirtiéndose en una opción perfecta para sesiones de juego casuales o para aquellos que buscan una experiencia en compañía.

No revoluciona el género, pero se hace su propio hueco en el mercado

El único punto negativo que se puede mencionar sobre Nikoderiko: The Magical World es que, si bien es un excelente título de plataformas, no ofrece innovaciones significativas ni revoluciona el género. Aunque es una experiencia sólida y cumple con las expectativas, aquellos que busquen una propuesta completamente nueva o innovadora pueden quedarse con la sensación de que el juego se mantiene dentro de los límites de lo conocido.

No obstante, cabe destacar que muchos juegos han intentado seguir las huellas de títulos tan icónicos como Crash Bandicoot, Donkey Kong, Mario Bros., etc., sin lograr resultados satisfactorios. En este caso, Nikoderiko demuestra que no siempre es necesario innovar para ofrecer una experiencia de alta calidad. Aunque no introduce conceptos nuevos, ejecuta de forma sobresaliente todos los elementos esenciales del género, logrando una experiencia de juego que se siente completa, pulida y genuina.

El juego se destaca en cada uno de sus apartados: su estilo visual, su jugabilidad accesible y desafiante, su variedad de niveles y mini-juegos, y su modo cooperativo local lo convierten en una opción excelente tanto para los fanáticos de los plataformas como para aquellos que buscan una experiencia de juego divertida y atractiva. En resumen, Nikoderiko: The Magical World es una recomendación obligatoria que, sin reinventar el género, demuestra que en los videojuegos lo que realmente importa es la calidad de la experiencia que ofrece.

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Este análisis se ha elaborado gracias a una clave digital del juego ofrecida por Jesús Fabre PR.